jueves, 23 de abril de 2015

Jordi Soler rescata el tesoro de Moctezuma

La leyenda es muchas veces un sitio a medio camino entre la realidad y la imaginación. Así ocurre con el famoso tesoro que Moctezuma dio como dote a una de sus hijas casada con un noble español del Pirineo catalán, donde lo escondió para siempre. Durante siglos se ha contado esta leyenda entre los bosques cercanos a su palacio de Toloríu y más de uno ha hecho sus indagaciones para encontrar dicho tesoro, Jordi Soler lo ha encontrado. El escritor mexicano nos cuenta esta historia delirante, que se basa en gran parte en episodios reales, en su última novela titulada “Ese Príncipe que fui” (Alfaguara, 2015), que trasciende a esa hija de Moctezuma y narra la vida de un supuesto descendiente de la princesa que vivió como un auténtico heredero de la dinastía imperial azteca en la España franquista.

-    Buscas el tesoro de Moctezuma y acabas el libro con una maleta que ese príncipe impostor te regala… ¿qué hay dentro?
Yo soy un admirador del cine de Luis Buñuel y su cine está lleno de esas cosas. Es en realidad un homenaje. En la película Belle de jour con Catherine Deneuve, ella durante el día trabaja en un burdel aunque es una dama de sociedad y por la noche es mujer de un señor normal. Por los pasillos de este burdel todo el tiempo hay un chino inexplicable que camina por ahí, abre una cajita que le enseña a las putas y a los clientes y todos se asombran pero tú nunca ves qué hay. Me parecía divertido que hubiera una maleta así, de hecho en mi novela “Los Rojos de ultramar” hay otra maleta en la que nunca se sabe qué hay, está todo el tiempo ahí palpitando en la novela, los personajes están a punto de abrirla, se acaba la novela y nunca la abren. -Nos dejas con la intriga…- Sí, es intriga también para mí, pero ¡a saber qué hay en esa maleta!

-       ¿Y qué suele haber en tu maleta?
Bueno, la tienes ahí, si quieres la revisamos. Te encuentras básicamente libros y ahora como regreso a casa, libros y kilos de tortillas. Por eso traigo ese maletón, normalmente viajo más ligero. Pero dije ahora voy a llevar una despensa.

-       Juegas con tus lectores y nos haces creer que estás siendo muy periodístico en todo momento sobre lo que sucede con la princesa y el heredero…
Sí, porque creo que con frecuencia las novelas aciertan. Creo que un Moctezuma donde debe acabar es en México. Ser Moctezuma en Europa tiene poco sentido, en México sin embargo es importante. Por eso le doy ése final.

-      ¿Te ves reflejado en algún momento en la figura de este príncipe que podríamos decir “hace las Europas”, el camino inverso?
Hace el camino inverso, sí. Creo que hay un puente entre los dos países por donde se va y se viene, da igual a dónde vayas llegando. Es una inquietud que está en todas mis novelas. No es que me identifique pero me apasiona la forma en que mi príncipe soporta la ruina, siempre con una dignidad admirable. Hace reír ver al príncipe ya hecho un desastre bebiendo un vino infecto pero es un hombre que hasta el final mantiene una conmovedora dignidad.

-   

 Tiene mucho de novela de caballerías, muy quijotesca en más de una ocasión con esos pasajes místicos o la relación con su fiel ayudante Crispín.
Sí. Yo soy un escritor cervantino, me interesa rescatar ese estilo de literatura que España abandonó, extirpó de su historia por la dictadura franquista. A partir de Franco se acabo el estilo Valle-Inclán, digamos, y vino un realismo  que persiste hasta hoy. A mí me parece importante proponer este regreso de esa rama que es española: el Quijote, el Lazarillo de Tormes… Y esta novela, con toda humildad, está escrita en ese estilo. Por cierto, en Latinoamérica sí persiste. Todos los escritores latinoamericanos somos bastante disparatados (ríe). Las novelas explotan para todos lados (continua riendo divertido).

-       El libro te sirve para hacer un retrato de la sociedad española de la época franquista, pero también alcanza al México de nuestros días.

Sí, hay una crítica mordaz a las dos partes. En el fondo es una crítica a la identidad. ¿Por qué te puedes sentir orgulloso de haber nacido en un metro cuadrado específico por puro azar? Es una cosa que no entiendo y queda muy claro aquí. También hay una crítica a la manera en que los sucesivos gobiernos españoles se han relacionado con América, hay también una crítica a la forma en que México mira a los españoles. Yo que tengo un pie en un país y otro en otro lo veo con mucha claridad. No se ha hecho ni el más mínimo esfuerzo. Es ridículo que Latinoamérica no sea el principal aliado de España, por los dos lados. Y sobre todo México.


miércoles, 18 de marzo de 2015

PERIODISTAS DE A PIE: la lucha contra el silencio y el miedo a informar

El colectivo Periodistas de a pie gana el premio de periodismo Julio Anguita Parrado por su misión de formar y apoyar a los periodistas amenazados en México.

Tienen sólo un habitación con libros, revistas, un par de ordenadores y hasta una silla que es una caja llena de viejas publicaciones. Si el tiempo lo permite en la Ciudad de México también cuentan con una pequeña azotea con una mesa de camping para trabajar. “Esto es todo. Esto es Periodistas de A Pie”, me cuenta Daniela Pastrana, directora ejecutiva de esta red de periodistas que acaba de recibir el Premio Julio Anguita Parrado.
 
Cierre Encuentro Internacional Tejiendo Redes. 
“Pensamos este nombre cuando nos fundamos porque queríamos reivindicar un periodismo que va a la calle, a los temas sociales”, comenta Pastrana. Sin embargo, en el inicio de este grupo de periodistas, colegas de varios medios de comunicación, no había otra cosa que la idea de mejorar el trabajo periodístico, por ello, comenzaron la labor de capacitación: organizar talleres, conferencias… Hasta que “nos agarró la violencia como en 2008 y se empezaron a generar espacios de violencia y silencio. Nuestros compañeros periodistas empezaron a tener miedo y generar estrategias de censura en su trabajo” - cuenta Margarita Torres- la “académica” como le define Daniela porque ejerce profesionalmente como profesora en la Universidad Iberoamericana.

Fue en mayo de 2010 –tras el fallecimiento de Armando Rodríguez- cuando redefinen la labor de Periodistas de a Pie porque fue el año en el que más periodistas se ha asesinado en México e incorporan la lucha y defensa por la libertad de expresión y los derechos humanos. “Iban cayendo compañeros reporteros, casi uno por mes…”, recuerda Daniela con la emoción en la voz y en los ojos. Y se vuelve a emocionar al citar el momento en que más de 2000 periodistas salieron a la calle en DF bajo el lema “los queremos vivos”, como consecuencia del secuestro de cuatro reporteros en Durango que fueron liberados con vida tras dos semanas intensas.  

Así comenzaron a hacer esta labor silenciosa de fortalecer el periodismo a través de la organización de redes de periodistas “con la idea de que para cambiar algo había que fortalecer el periodismo en los estados, sobre todo en los más complicados”. Siguieron con los cursos formativos y con un diplomado de derechos humanos que reunió a gran cantidad de compañeros de todas las regiones del país y fue clave para articular esas redes de periodistas que sirven para auto-protegerse.

Golpes duros para el periodismo


Sin embargo vinieron años difíciles para los colegas de Veracruz en 2012 y 2013 “los sentía tan solos, tan lejos de nosotros y con tanto miedo. Yo me obsesioné con esta cuestión, para mí era algo personal ya”.  Daniela afirma ahora sentirse casi como una madre para ellos y cada vez que ha surgido una situación difícil - “golpes duros” como los define - corre a darles apoyo in situ porque cree que es muy necesario. Saltan nombres de colegas caídos como Regina Martínez o Gregorio Jiménez que detonaron otra manifestación multitudinaria que unió a toda la profesión bajo una misma pancarta pero sobre todo una nueva misión clara para este colectivo, la de observación. “En esta evolución de nuestra labor no nos podíamos dar el lujo de abandonar los dos pilares que eran la capacitación y la defensa de la libertad de expresión, pero sentimos que la investigación era el siguiente paso”, afirma Margarita. Se desplazaron a Veracruz para investigar la desaparición y muerte del compañero Goyo Jiménez puesto que las autoridades no daban respuesta. “Es una de las mejores cosas que hemos hecho, en tres días dieciséis reporteros conseguimos más información que en dos semanas todo el aparato del estado de este país. Demostramos que somos buenos reporteros”, admite orgullosa Daniela.

Fundación  Red de Periodistas de a pie. 
Pero no hay que perder de vista que todo esto ocurre en un país que oficialmente no está en guerra y se mantiene en lo más alto de los ranking mundiales por ser uno de los lugares más peligrosos para ejercer el periodismo del mundo, equiparable a Irak.  Con cierto enojo me decía Daniela: estamos fingiendo que esto es una bonita democracia pero no se sostiene si sólo el 2% de los delitos son sancionados, el sistema judicial no funciona”, aunque apostilla que la responsabilidad no es sólo de su país, México, sino de todos los aliados como Estados Unidos o Canadá que cierran los ojos en pro de sus intereses económicos.
Consigo contactar con Marcela Turati, reconocida por Reporteros Sin Fronteras como una de las 10 mejores periodistas en zona de peligro y es miembro fundadora de Periodistas de a pie, de hecho de ella parte la idea en 2007. Ahora se encuentra en España donde recibe la noticia de este premio. Marcela se niega a definirse como activista o periodista: “soy una periodista que defiende la libertad de expresión y el derecho de la gente a estar informada. Y quizás soy nueva en esto del activismo pero me metí cuando vi que había muy pocos en esa trinchera contra el silenciamiento forzado y lo hice porque creo que donde se instala el silencio gana la muerte y que hay que apostarle a la vida”. Y qué gran verdad… Marcela habla del gran problema de su país y confirma ese oscuro panorama donde es difícil ejercer el periodismo y lo peor es la impunidad con la que se comenten estos crímenes: “México es un país donde en los últimos 15 años han asesinado a 103 periodistas y desaparecido 25 y que a partir del año 2010 México fue considerado tan mortífero como Irak. Estos crímenes no se investigan, no se castigan, permanecen impunes. Matar a un periodista no tiene castigo alguno. Las fuentes de riesgo son principalmente los funcionarios de gobierno y las organizaciones de delincuencia organizada muchas veces coludidas entre sí”.
Pero Margarita pone vitalidad y una sonrisa a todo esta fotografía y nos cuenta que el periodismo está cambiando, desde las aulas donde ella imparte ética y donde transmite esa labor de Periodistas de a pie: “hacemos una apuesta por el periodismo, por el valor que tiene la información. La información nos importa y nos importa que la sociedad señale y diga que vale la pena. Y hoy los estudiantes sean suficientemente creativos para enfrentar todas estas condiciones y hacer un periodismo diferente.

El Premio de Periodismo Julio Anguita Parrado


“¿Heroica labor? No me siento nada heroica. Es lo que nos toca hacer. Yo elegí ser periodista hace muchos años y sé que esto implica cierto riesgo porque incomodamos a los poderes”, me contesta Daniela refiriéndose al comunicado del premio fallado esta semana. Todavía se están felicitando en esta mañana y sin saber bien qué repercusiones tendrá la entrega de este premio, sin embargo Marcela agradece el orgullo y el entusiasmo de la solidaridad internacional: el premio lo recibimos todas y todos los miembros del colectivo muy entusiasmadas y nos hace sentirnos más comprometidas con la labor que estábamos realizando. Viene bien saber que en otras partes del mundo se mira con cariño lo que hacemos y se nos reconoce. Este premio además es especial porque honra la memoria de un colega, Julio Anguita Parrado, asesinado durante el ejercicio del periodismo. Nosotras, nosotros en México sabemos lo que es eso y cada muerte o desaparición de un periodista nos parece indignante”, sentencia la reportera de Proceso.
Taller Cobertura Responsable del Narcotráfico. 
Lo recibe igual de orgullosa y emocionada Margarita: “te hace sonreír y recordar a todos los que nos han ayudado y a los colegas que nos han acompañado en este tiempo a hacer Periodistas de a pie y a recordar todos esos temas que no queremos que queden invisibles”. También me cuenta Daniela Pastrana que aún no habían recibido la información oficial del fallo del premio, que apenas se habían enterado por la prensa pero ya se muestra ilusionada con viajar a España y contar la experiencia de lo que viven en México. Yo ya quiero retirarme -me dice - quiero vivir en Burgos y entre risas, le cuento que un destino para quedarse es Córdoba, cuando lo conozca en unos meses ya me contará.

Generar espacios de publicación 

Esos Periodistas de a Pie, que han crecido como colectivo en este devenir desde 2007, aprendiendo de los golpes, hoy lo conforman 11 personas junto a otros 40 periodistas que tejen esa red en todos los estados del país. No olvidan que un periodista debe informar y en este caso tienen varias publicaciones dirigidas a dar voz a esos colectivos silenciados. “Entre las Cenizas” es un libro y un website con 10 historias de lucha contra la marginación en este país que no se publicaría en otro medio y por eso surgió este libro. Además editan un pequeño periódico para migrantes llamado “En el Camino”, puesto que sabemos que México es país de paso desde otras zonas de marginación de Centroamérica. Ofrecen información periodística útil, amena para estas personas que acuden a albergues y carecen de medios.
Daniela aprovecha la ocasión para hacernos un anuncio que compete a esta misión de informar. En una semana sale la web “Pie de Página” que recogerá estas historias que velan por los derechos humanos en todo el país y que según dice dará visibilidad a muchos colegas que trabajan en México en la sombra y no encuentran espacios de publicación”.

Bien parece que Periodistas de a Pie no se cansa. Además han participado en la puesta en marcha junto a otras organizaciones y diversos medios de comunicación mexicanos del portal MexicoLeaks, con la idea de ofrecer una plataforma segura para la filtración de información y documentos de interés público que hagan más transparente esta sociedad. Un periodismo diferente y comprometido en un país que está cada vez más cansado del crimen y el miedo, eso hacen colectivos como éste.


domingo, 8 de marzo de 2015

La Momia de Orizaba como metáfora

Esta semana ha causado bastante sorpresa, estupor la noticia sobre la momia encontrada casualmente por unos montañeros en el pico Orizaba, el tercer más alto de América, a más de 5000 metros. La foto ya ha dado la vuelta al mundo y ustedes la habrán podido ver.


Leo en la prensa que eran dos montañeros abrazados que hace más de medio siglo murieron por una avalancha curiosamente el Día de Muertos. Como es de caprichoso el destino... Pero fuera de la historia casi novelesca de estas momias y del hallazgo, ahora la polémica por otro lado.

Que si la foto se extrajo del grupo de los montañeros en Facebook que no querían revelar el hallazgo para evitar que curiosos accedieran con dificultades al lugar como digo a más de 5000 metros. Y el gobierno que el rescate es costoso, que la gente no tenga la peregrina idea de subir para verlas en persona. No. Aquí el humor es como ese catalizador de una sociedad compungida de la putrefacción de otras momias... de esas que se sientan en los sillones de poder, y no han tardado en sacar fotomontajes y bromas al respecto.

México, un país donde la muerte se vive tan al día a día. No sé a quién podría sorprender una momia de hace 50 años en una montaña nevada... si hay en las calles todos los días cientos de cuerpos de los que no se habla en los medios. Así es la realidad. Anécdota o no, que salga a relucir una momia en lo más alto de este país, es un claro ejemplo de lo que sucede en Los Pinos... No hay respuesta al gran problema de violencia del narco, al narco-gobierno que cada día harta más a tantos mexicanos que han salido estos meses a la calle. Y ahora... justo ahora (año electoral) sale a relucir una momia que falleció por una avalancha de nieve. Avalancha en las calles gritando ¡Ya me cansé!

Cuanto menos me parece poético y una reflexión que podríamos hacer más allá de la nota de programa de misterio y esoterismo... Ojalá esto cambie. Me duele México...

miércoles, 25 de febrero de 2015

"Kingsman", una de espías con chispa

¿Cuántas pelis de espías hay con tipos elegantes de traje que no despeinan por mucho que peleen contra los malos y tenga que dar doble voltereta en el aire para salvar a la humanidad? ¡¡Muchas!! Algunas ya han llegado a los límites de la física y la gravedad. Sin embargo, en "Kingsman: el servicio secreto" encontramos el clásico género de espías con un ingrediente nuevo, juvenil... más sentido del humor y un juego que incluye al espectador en el que sabemos que la ficción es ficción y Einstein no se tiraría de los pelos al ver esos saltos imposibles. Basado en el exitoso cómic y dirigida por Mathew Vaughn (X-Men, Kick Ass...)

Cortesía: FOX    
Además en Kingsman tenemos el tradicional cuento del patito feo o de la Cenicienta si lo prefieren... con algunas distancias, claro. Esta secreta organización clandestina ocultos tras una elegante sastrería inglesa adoptan a un joven callejero de malos modales para ser el futuro miembro de la agencia. Un joven de 17 años de la generación "ni-ni" -que ni estudia ni trabaja y de familia desestructurada- (Taron Egerton) se convertirá en el nuevo salvador de la humanidad bajo la tutela de Colin Firth, que luchará contra un villano muy "hiphopero" y de divertido acento interpretado por Samuel L. Jackson.

Como digo película bastante juvenil y sin pretensiones más allá de divertirnos.  No faltan los efectos especiales que en más de una ocasión nos hará carcajearnos de la tragedia recordando a alguna escena de pelis de género como Kill Bill vol.I. Merece la pena ver este film por oír los pinceladas de humor inglés que el director ha introducido en el guión, la elegancia a ratos de los oxford a cuadros y con sabor a pelea callejera otros, así como la sorprendente interpretación del veterano L. Jackson

Creo que no defraudará pero, por favor, mejor en versión original subtitulada. Os dejo un avance.






miércoles, 11 de febrero de 2015

Carmen Reviriego: El arte de escribir sobre arte sin ser pedante


Muchas veces pensamos en una definición de arte y pocas encontramos una tan buena como la que nos da la enamorada y experta en arte Carmen Reviriego, “El arte es algo que te conmueve, que te emociona, que te lleva a lo más profundo de ti, ahí donde están guardados los sentimientos más profundos de cada uno y se produce esa comunión con el artista”. De emociones y sentimientos sabemos todos los seres humanos al enfrentarnos a observar una obra, pero del intrincado mundo del coleccionismo, las subastas, las ferias, galerías no tanto… para eso Carmen ha escrito este ensayo llamado El Laberinto del Arte (Paidós, 2015), donde para cualquier iniciado o curioso queda muy bien plasmada esa comunión entre placer o dinero, entre lo sagrado o lo profano.

-       ¿Cómo es de difícil reunir en un libro personajes y nombres propios como los que tiene este Laberinto del Arte?
Muchas de estas personas están en la lista de los 20 top del mundo del arte, entonces sí tiene mucha dificultad, pero al final yo creo que se basa en la confianza. Ya me conocen y también es el proyecto, les gustó muchísimo. Les pareció que era una idea buena, una idea que podía ayudar a acercar el arte a las personas que quisieran convertirse en coleccionistas y también acercar al arte a todos los que tuvieran curiosidad. En este libro hay personas que tienen un sentido del arte muy profundo como puede ser Patricia Phelps Cisneros o el mismo Guillermo Kuitca… Está el lado más sagrado y el lado más profano del arte que son, por ejemplo, Marc Spliegler, director del art basel Miami y Hong Kong o el mismo presidente de la casa de subastas de Sotheby´s y te das cuenta que aquí están los dos lados, el lado sagrado y el lado profano del arte. ¿La gran dificultad de este libro? Conciliar los dos lados y que todo el mundo esté contento, que todo el mundo se sienta bien y que nadie se sienta herido en sus sensibilidades.
-       Es un mundillo muy hermético, para los que estamos fuera es como si entrásemos en una cueva oscura…
Es un mundo que hay que conocer pero ¿hermético? Claro, por eso también la idea de este libro, por hacer acercar y enamorar. He querido enamorar con el libro, a través del conocimiento porque siempre para amar algo hay que conocerlo, sea lo que sea. ¿Sabes qué pasa? Los propios profesionales del arte hablan del arte de una manera muy excesiva, muy pedante. Y me parece que eso no ha hecho bien. Yo creo que del arte hay que hablar de una manera muy sencilla. El arte si no sirve para acercar el hombre al hombre no es arte. Cuando hablamos de arte estamos hablando de emociones, de sentimientos.

-       Y sí descubrimos esa sencillez en tu libro…
Yo no entiendo la complicación al hablar de emociones, a la hora de hablar de sentimientos, no lo entiendo. No lo entiendo porque el lenguaje del arte es el lenguaje más humano que hay. Es el lenguaje de la supervivencia… Si una obra de arte, el David de Miguel Ángel, lo aprecia el hombre de hace 400 años, lo apreciamos nosotros, lo apreciará el hombre de dentro de 2000 años ¿y qué vamos a ver? Estamos hablando de un lenguaje muy esencial, muy humano. Creo que del arte hay que hablar de una forma muy sencilla. Hemos tenido conversaciones muy profundas con los artistas, pero todo muy fácil de leer y digerir.
-       ¿Son malos tiempos para el mundo del arte, para esa parte profana, el negocio?
Es un momento maravilloso. En toda la crisis mundial que hemos vivido el arte se ha mantenido muy estable, se ha mantenido ajeno a los vaivenes bursátiles.  Al arte le va muy bien desde hace mucho tiempo. En los últimos 10 años el arte se ha mantenido como un valor muy estable.

-       ¿Hay que tener un carácter especial para ser coleccionista y que muchas veces no te engañen cuando entras en este mundo, no te den gato por liebre? ¿hay que tener una sensibilidad especial o dejarte sólo bien aconsejar?
Yo creo que lo primero que tiene que hacer cualquier coleccionista, alguien que quiere coleccionar, no es ser licenciado en bellas artes, lo que hace falta es entrenar el ojo, ver ver, mirar mirar y descubrir algo que nos emocione. El arte siempre son emociones. El arte tiene que emocionar, conmover, tiene que hacerte sentir. Lo que te guste, lo que te emocione, con lo que disfrutes y a partir de ahí decidir lo que uno quiere coleccionar y por supuesto, cuanto más importante va a ser la colección, más importante es la labor del asesor, para equivocarse lo menos posible.

-       Hoy día ¿es más difícil llegar al público con todo lo ecléctico que es el arte contemporáneo? ¿se tiende a coleccionar más obras antiguas?
Pues depende de las personas. Hay personas que viven en estado de espera y personas que viven en estado de esperanza. Eso no tiene que ver con la edad. Decía en el “Ensayo sobre la Ceguera” Ortega y Gasset, que el arte contemporáneo es lo que está por llegar. Creo que no hay un perfil, son actitudes, formas de ser. Son gustos, lo que a uno realmente le emocione.
  -    Hombre, el arte contemporáneo tiene algo de mala fama en general…
Mala fama… Fíjate que el arte contemporáneo ahora mismo es lo que más se vende junto al arte moderno en el mercado del arte. Si me dices si disfruto con un Rembrant, ufff, tremendo, con un Velázquez… pero también disfruto mucho con el arte contemporáneo. Me sorprende mucho y además es una manera de estar atento a lo que viene, a las nuevas tendencias, a lo que está ocurriendo en el mundo de hoy… Siempre ha habido trasgresión en el arte dependiendo de los tiempos, es lo que lo hace evolucionar.

-       ¿Alguna anécdota o situación inédita que hayas vivido en una de esas tensas subastas de arte?
Tensas sobre todo, es tensa cuando tu tienes una pieza tuya que se está subastando y ves cómo van subiendo los millones (ríe nerviosa) ahí sí hay mucha tensión por la responsabilidad. Hacer una subasta bien tiene mucho detrás, hay muchos aspectos que son claves a la hora de hacer una buena subasta. Son meses de trabajo que están ahí, lo puedes hacer muy bien o lo puedes haber hecho muy mal pero cuando trabajas con buenos profesionales lo normal es que lo hagas muy bien. Pero así anécdotas simpáticas que te pueda contar… no sé…

-       Pensé que esas situaciones te podrían resultar de inspiración para que tu próximo libro sea una novela basada en el mundo del arte…
(Se escandaliza y bufa) Claro, anécdotas tengo… sí, de personas que viven tan apasionadas que a lo mejor mucha parte de su vida ha girado en torno a una obra, y llegan a enajenarse con algo que no es… Es salirse de uno mismo. A veces vivir con uno mismo es terrible, no porque uno sea mejor ni peor, sino porque uno se da cuenta que está solo. Entonces la soledad en la que vivimos todos, a veces hace que se enajene con una obra de arte… hombre claro, son tantas anécdotas. Pero mira, una cosa es escribir un ensayo y otra cosa es escribir una novela. Humildad. Yo no soy escritora, yo soy ensayista. Este es mi segundo ensayo, soy ensayista. ¿qué podría escribir una novela? Lo que pasa que soy presidenta de una compañía y no tengo tiempo (ríe). Yo creo que mi próximo libro tendrá que ver con el arte, ir al sentido más profundo todavía del arte. Vuelvo a escribir de las artes plásticas. Voy a hablar de emociones, de sentimientos, de humanidad…
-       ¿ves? Ahí casi estás rozando ya la novela… (se ríe)
Qué mona eres…



martes, 18 de noviembre de 2014

Iñárritu transforma a ícaro

 Todos tenemos esa voz interior que nos habla para decirnos qué debemos que hacer y que no. Una batalla interior con ese fantasma que controla nuestra vida llamado ego. Pero a ninguno se nos habría ocurrido vestirlo de superhéroe, en todo caso de villano. Alejandro González Iñárritu sí se da el gusto de endulzarse el paladar cinematográfico con este postre, chiloso, pero postre como él lo ha definido en su presentación oficial durante el pasado festival de cine de Venecia de su nueva película, “Birdman. La inesperada virtud de la ignorancia”.

Entrevista publicada en Life&Style Noviembre
Sabemos del afán perfeccionista del director mexicano de Biutiful que en más de una ocasión ha mostrado la grandeza de su ego, la alta valoración de sí mismo. Pero, ¿no es ahí donde tal vez reside su genialidad? ¿La clave de su éxito? Ese afán inagotable por encontrar un nuevo y mayor reto que llevar a la pantalla le ha enfrentado a sí mismo, a un viaje interior, a la necesidad de sentirse vivo –como ha afirmado-, a un proceso de maduración como director que nos demuestra en esta nueva cinta, precedida ya de los parabienes de la crítica. Iñárritu convertido en un Quijote enfrentándose a los enormes molinos de viento, afrontando que las críticas no siempre le han sido favorables pero ya ha aprendido que la vida -la vida de cada uno de nosotros-, la validamos nosotros mismos, no alguien ajeno a nuestro yo, al Birdman que llevamos dentro.  

Su voz es grave, fuerte, incontestable al hablar y defender su trabajo. Cuenta la verdad, que es “su” verdad, su forma de concebir las relaciones humanas, como ya ha hecho en tantas ocasiones a lo largo de su carrera. En Birdman nos trae a Riggan Thompson (Michael Keaton) un actor hundido en la mediocridad y el olvido que trata de reinventarse a sí mismo con una obra teatral en Broadway. Y apreciamos ese paralelismo, esa tragedia griega que nos narra en tono de comedia negra con un solo movimiento de cámara en toda la película, es decir, sin cortes (o esa es la ilusión que nos ha insuflado). Como es habitual sabe rodearse del mejor equipo para alcanzar la excelencia en su trabajo. Enmanuel Lubezki se hace cargo de la fotografía, la música vuelve a jugar un papel protagonista en la narración y el rodaje en plano-secuencia la convierte en la mejor cinta de su carrera hasta el momento, académicamente hablando. No en vano, suena su nombre y el de sus actores en las quinielas del Óscar, aunque de momento se ha quedado sin premios oficiales en el Festival de Venecia.

Iñárritu no es un superhéroe pero tiene el poder o el don de convertir en oro casi todo lo que toca, al igual que éste, otros proyectos que ya prepara para el próximo año nos darán aparte del postre, un menú completo de sabores agridulces.

Yo, el ego

En esta cinta mezcla realidad y ficción en el marco de una comedia negra. ¿De dónde nace la idea de retratar a este actor de Hollywood venido a menos?
La verdad que el inicio de todo fue la idea del ego, de explorar el ego. Y de cómo el ego juega ante nosotros. Mi idea era hacer una exploración del ego.

En alguna ocasión ha mencionado que estas historias las motivan miedos personales o circunstancias cercanas a usted. ¿En este caso cuál es su mayor miedo, la crítica de la industria del cine?
No, yo creo que más bien es el sentido de las cosas, cuál es el sentido de las cosas, creo que esa es la pregunta que intenta ser. Cuales son las prioridades, cual es el valor de las cosas real. Creo que esas son las preguntas que el personaje de Riggan Thompsom es.

Y la frustración de este personaje es aplastante, al punto de oír una especie de voz interior…
Absolutamente. Birdman es su ego.

Supongo que se refiere a la voz de la autocrítica
Nuestro ego es el inquisidor de cada uno, sí, así es.

¿Alejandro se ha llegado a acostumbrar a esa crítica? ¿Le han tratado bien/mal?
De todo, y creo que todo el mundo lo tiene, no tiene que ser cineasta o actor. Todos en la vida tenemos miedo al rechazo, todos nos embarcamos como un viaje de validación, y a veces equivocadamente le damos el poder a la gente para validarnos. Y ése es el viaje del personaje de Birdman. Creo que todos en la vida experimentamos eso, la necesidad  de ser aceptados, amados… Eso creo que es un tema universal que por eso lo quise explorar a través de un actor en este caso.

“Equivocadamente le damos el poder a la gente para validarnos”

“Nuestro ego es el inquisidor de cada uno”

¿Cree que es la peor parte de la industria de Hollywood, esta especie de submundo en el que caen los actores como ocurre en el papel de este Birdman?
No, no creo que sea algo relevante. En realidad eso puede ser un sentimiento perecedero, simplemente es parte del negocio. Yo creo, repito, que depende de cómo abordes eso. Para un minero en África puede ser - si ésa es una tribulación- puede ser irrisorio que eso sea un problema. Es un poco, yo creo que como el ego toma esas cosas, pero si lo ves con perspectiva yo creo que es irrelevante absolutamente.

El Cine y Birdman

¿Esta vez ha tenido mayor dificultad durante el rodaje de esta cinta debido al uso que hace del plano-secuencia y lo reducido del espacio en el que se desenvuelve la trama?
Sí, fue muy difícil técnicamente y sobre todo conceptualmente tener una película sin la posibilidad editar. Implica un atentado a la naturaleza misma del cine. Sí hubo mucho trabajo para poder, digamos, tejer una película así.

“Esta película implica un atentado contra la propia naturaleza del cine”

¿Ve algún paralelismo en la carrera actual de Michael Keaton con el papel que interpreta en Birdman?
Pues sí, el vistió la capa de Batman, inmediatamente se separó un poquito de la industria. Pero más que nada escogí a Michael por su talento istriónico, es un tipo con una capacidad enorme en la comedia y también en el drama y es algo muy difícil de encontrar. Eso me parece mucho más importante que lo otro, bueno, ese hecho sí evidentemente le da una autoridad al papel.

¿De qué manera se ha entregado Keaton a esta interpretación? Es otro de los nombres que ya suenan para el Óscar.
Se lo merece. Es excepcional.
 
Cortesía de FOX Corp.
Has presentado Birdman en el Festival de Venecia y viene ya precedida  por buenas críticas que incluso la colocan en la carrera por lograr el Óscar de Hollywood. También usted figura en las quinielas de los nominados. ¿Comparte esa opinión generalizada? ¿Cuáles son sus expectativas con esta cinta?
La verdad es que tengo pocas expectativas porque es una película muy experimental, muy académica. ¡Qué bueno que le guste a una cierta parte del público! Con eso ya me doy por satisfecho, ésa es la verdad.

¿González Iñárritu sueña – o ha soñado- con el Óscar al crear una historia para la gran pantalla?
No, no (ríe). No habría hecho esta película. Esta película no es muy de Óscar, esta es más un experimento arriesgado. Las películas de Óscar tienen otra naturaleza, creo yo.

“Esta no es una película muy de Óscar, es más un experimento arriesgado”

O igual por esa condición misma de experimento puede sorprender y convertirse en un gran éxito…
Buehh (sonoriza su duda). Vamos a esperar. Esperemos que el público diga lo que tenga que decir y ojalá que les guste…

Con esto llega a bromear en la trama de Birdman, con que el público espera pelis de acción, grandes taquillazos y no tanto cintas que reflexionan sobre asuntos, cuestionan…¿Cree que ahí se enmarca su cinta?
Quizás, quizás. Tampoco creo que sea una película demasiado velada, pero tampoco creo que sea una película muy obvia.

Es bastante paralela la historia del actor Riggan Thompson (Keaton) con la obra teatral que está representando en Broadway.
Sí, sí, de alguna forma habla del teatro en cine y hasta inserta esas dos cosas en una sola idea. Ojalá así sea como se vea.

Desde Biutiful ¿qué tiempo se ha tomado para sacar este y otros nuevos proyectos?
Bueno, me tomé 4 años para sacar este proyecto.  Aunque lo filmé el año pasado, pero sí fue bastante, la verdad.

¿En qué momento está para usted claro que ya un proyecto está listo para arrancar?
Bueno, pues cuando alguien pone dinero (sonríe). El cine necesita dinero y sin el dinero no podemos hacer nada.  Ese es el problema. Una vez que tienes el financiamiento ya la película empieza a ser una realidad.

“Hacer una película es un milagro, es casi imposible hacer una buena película”

Bueno, pero Iñárritu es una marca con garantía de éxito, ¿no?
Pues digo, uno hace lo que puede. La verdad es que uno hace lo mejor pero nadie tiene garantías. Hacer una película es un milagro, la verdad es que es casi imposible hacer una buena película porque hay tantas posibilidades de fallar, hay tantas cosas que pueden ir mal… que cuando sale algo bien hay que celebrarlo en cualquier lugar. Y esa es la verdad.